Hoy os voy a enseñar un proyecto del que me siento muuuuy orgullosa.
Ya llevo tiempo queriendo embarcarme en el tuneo de un mueble de mi casa, pero me faltaba el empuje y sobre todo el tiempo.
Teníamos en el comedor, una mesa de centro que nos servía para todo, cena en bandejas, actividades de los niños,.., pero la pobre había vivido tiempos mejores y estaba bastante perjudicada. Así que nos decidimos a darle un descanso y comprar otra, habíamos estado mirando opciones, pero no nos acababa de encajar lo que veíamos, primero porque iba a ser un pegote y tenía que ser un pegote bueno, bonito y barato y sobre todo que tuviera ese "yo que se".
Nos fuimos a Ikea (para un apaño ideal) y llegamos a comprar la mesita, más o menos nos podíamos arreglar con su altura y tamaño y aunque no era la mesita soñada (a mi me gustaban unas que habíamos visto rollo vintage, que no dejaban de ser un pegote y nos costaban un ojo de la cara), pues eso que era blanca y nos podía servir, pero una vez en casa,........oye por qué no vemos lo que nos costaría arreglar esta????
Unos tableros, pintura (chalck paint, cómo no!!!) y a empezar.
Y de esto:
Ha resultado esto;
Os gustaaaaaa? Ahora me falta la casa en la playa.
Con esta entrada participo en el finde frugal número 126
Y ahora el video: